La Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial Federal rechazó la demanda presentada por el Banco Macro para que Google adopte medidas que impidan las estafas a través de sitios que utilizan su nombre de forma fraudulenta.
La entidad reclamaba que Google fuera obligada a adoptar medidas que impidieran delitos mediante páginas de internet que emplean fraudulentamente “Macro” o “Banco Macro” ante “una ola de fraudes cometidos” mediante sitios que utilizan su marca “para capturar usuarios y contraseñas” y luego estafar a sus clientes “vaciándoles las cuentas o haciéndoles contraer obligaciones”.
La parte demandante agregó que “posiblemente delincuentes utilicen Google AAdWords –servicio de Google que permite la publicación de links en las primeras posiciones de los resultados de una búsqueda–, para posicionar sitios falsos, con una estética idéntica a la de su sitio oficial”.
La Sala III de la Cámara evaluó que el pedido de bloqueo de sitios semejantes a algunos que fueron suprimidos y que se abstuviera de contratar anuncios fraudulentos, fue realizado sin una previa individualización de los links, por lo que “no cabe disponer que Google suprima enlaces sin ningún tipo de requerimiento o advertencia comprobada por quien alega una lesión a su reputación” o a sus clientes.